El Control de Líquidos en Personas en Diálisis
Por: Roxana Y. Torres Cruz MHSN, RDN, LND
Las personas con fallo renal o enfermedad crónica del riñón estadio 5 no pueden manejar con efectividad el exceso de líquido y desperdicios en el cuerpo. La acumulación de líquidos puede llevar a alta presión, edema pulmonar y fallo cardiaco. El tratamiento de diálisis remplaza las funciones del riñón, incluyendo la remoción de líquido extra en el cuerpo.
Cualquier alimento que sea líquido a temperatura ambiente es considerado líquido. Esto incluye: jugos, agua, hielo, café, té, sopas y caldos, gelatina, mantecado y helado, leche, refrescos y “pudding”.
¿Cómo saber si está reteniendo líquido en el cuerpo?
A toda persona en diálisis se le calcula el peso seco (peso ideal que debe tener sin retención de líquido), esto determina el peso que la persona debería tener al finalizar la diálisis. Es por eso que el peso se toma antes y después de la diálisis, de esta forma se determina la ganancia en peso entre cada sesión de diálisis. Se recomienda una ganancia de peso menor de 4 libras (2kilogramos) entre las diálisis. Un valor mayor de este número significa mayor retención de líquidos. Esta retención puede estar relacionada a consumo excesivo de líquidos y/o alimentos altos en sodio.
Algunos de los síntomas que puede sentir son: dificultad para respirar, hinchazón en las extremidades y alrededor de los ojos, presión alta, pulso rápido, y en algunos casos tos.
¿Cómo controlar el consumo de líquidos en exceso?
Uno de los mayores retos que se pueden encontrar es la boca seca y la sed. Hay algunas condiciones como la diabetes, que aumentan la sed cuando están descontroladas. De igual forma, hay más de 1000 medicamentos que tienen como efecto secundario secar la boca. También, los alimentos altos en sodio y las altas temperaturas del clima pueden aumentar la sed. Existen varias alternativas para ayudar a controlar la sed y el consumo de líquido.
Alternativas para controlar el consumo excesivo de líquidos: